Dieta de Mayo Clinic
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¿Ataque a los refrigerios? Prueba estos refrigerios de 100 calorías
Los refrigerios saludables pueden satisfacer tu hambre y evitar que comas porciones adicionales en tu próxima comida, lo que puede reducir el total de calorías diarias. Los refrigerios también pueden proporcionarte energía por la tarde y nutrientes adicionales. Si estás tratando de bajar de peso, prueba estos refrigerios que tienen 100 calorías o menos: 1 taza de plátanos en rodajas y frambuesas frescas; 2 tazas de zanahorias; 2 tazas de palomitas de maíz hechas con aire; 5 galletas de centeno o de pan de centeno pumpernickel; 2 cucharadas de maní; 2 rebanadas del tamaño de un dominó de queso colby o cheddar bajo en grasa.
El ánimo y la comida: cómo romper el vínculo
¿Comes cuando no tienes hambre? Es posible que comas como respuesta al estrés o al aburrimiento. Presta atención a cuándo comes y cómo te sientes. ¿Tu hambre es física o emocional? Si comiste hace solo unas horas y el estómago no te hace ruido, es probable que no tengas hambre. Dale tiempo al antojo hasta que pase. Distráete y opta por un comportamiento más saludable. Da un paseo, escucha música o llama a un amigo.
Consejo para perder peso: no te saltees los refrigerios
¿Te sientes culpable por comer tentempiés? No lo hagas. Los tentempiés no son necesariamente algo malo. De hecho, las dietas para adelgazar bien planificadas permiten los tentempiés saludables para ayudar a controlar el hambre y a reducir los atracones. Comer un tentempié saludable, como una fruta fresca o vegetales crudos, puede ayudarte a que no te sirvas un segundo o tercer plato en la próxima comida y a reducir ampliamente la cantidad total de calorías que consumes.
Adelgazamiento: quita la comida de tu mente
¿Los pensamientos y los sentimientos acerca de los alimentos se interponen en tu camino de aprender hábitos alimentarios saludables? Prueba con estos cinco pasos: 1. Conoce tus hábitos. Durante algunas semanas, anota qué, cuándo y por qué comes. Fíjate si surge algún patrón. 2. Aleja la tentación. No tengas en tu casa alimentos que te reconfortan si te resultan irresistibles. 3. Date un gusto de vez en cuando para ayudar a controlar los antojos. 4. No te rindas. Es de esperar que tengas una recaída ocasional. Vuelve a subirte al tren.