Análisis de azúcar en sangre. Por qué, cuándo, y cómo
Si tienes diabetes, controlar los niveles de glucosa sanguínea puede ser una parte fundamental de tu bienestar. Esto ayuda a muchas personas con diabetes a controlar la afección y evitar problemas de salud.
Hay varias maneras de controlar la glucosa sanguínea. Puedes usar un dispositivo que mide los niveles de glucosa durante el día y la noche que tiene un pequeño sensor. Se llama glucómetro continuo. También puedes medirlos tú mismo cuando sea necesario con un dispositivo electrónico portátil en el que se usa una pequeña gota de sangre. Este dispositivo se llama glucómetro.
Por qué controlar la glucosa sanguínea
La revisión de la glucosa sanguínea brinda información útil para controlar la diabetes. Puede ayudarte con lo siguiente:
- Hacer un seguimiento del efecto de los medicamentos para la diabetes en los niveles de glucosa sanguínea
- Ajustar la dosis de los medicamentos para la diabetes con la orientación del equipo de tratamiento
- Averiguar si los niveles de glucosa sanguínea están altos o bajos De ser necesario, cambiar de tratamiento para controlar los niveles altos de glucosa sanguínea o consumir carbohidratos de acción rápida para tratar los niveles bajos
- Hacer un seguimiento del progreso hacia tus objetivos de tratamiento
- Aprender el efecto que tienen la alimentación y el ejercicio en los niveles de glucosa sanguínea
- Comprender el efecto que tienen otros factores, como una enfermedad o el estrés, en los niveles de glucosa sanguínea
Cuándo controlar la glucosa sanguínea
El profesional de atención médica puede indicarte con qué frecuencia debes revisar tus niveles de glucosa sanguínea. Por lo general, la respuesta depende del tipo de diabetes que tienes y tu plan de tratamiento.
Diabetes tipo 1
Es posible que el profesional de atención médica te sugiera un glucómetro continuo o medir el nivel de glucosa en la sangre de 4 a 10 veces al día si tienes diabetes tipo 1. Podría ser necesario que te hagas mediciones:
- Antes de las comidas y los refrigerios y, a veces, después de las comidas.
- Antes, después y, a veces, durante el ejercicio.
- Antes de acostarte.
- A veces, durante la noche.
- Después del tratamiento de niveles bajo de glucosa en la sangre.
- Con mayor frecuencia si estás enfermo.
- Con mayor frecuencia si cambias tu rutina diaria.
- Con mayor frecuencia si comienzas a tomar un nuevo medicamento.
Diabetes tipo 2
Si te administras insulina para controlar la diabetes tipo 2, es posible que el profesional de atención médica te recomiende un glucómetro continuo. O posiblemente necesites medir la glucosa en la sangre varias veces al día. La cantidad exacta de veces depende del tipo y la cantidad de insulina que usas. Por lo general, se recomienda hacer mediciones antes de las comidas y antes de acostarte si te administras más de una dosis de insulina al día. Es posible que solo debas hacer mediciones antes del desayuno y, a veces, antes de la cena o a la hora de acostarte si utilizas una insulina de acción intermedia o de larga duración.
Por lo general, podrías hacer mediciones con más frecuencia si te ocurre lo siguiente:
- Estás enfermo.
- Tienes que conducir largas distancias.
- Cambias tu forma de comer o de hacer ejercicio.
Si controlas la diabetes tipo 2 con medicamentos que no sean la insulina, es posible que no sea necesario que te midas los niveles de glucosa en la sangre todos los días. Es posible que tampoco tengas que hacer mediciones a diario si controlas la afección solo con dieta y ejercicio.
Glucómetros continuos
Las personas con diabetes pueden usar glucómetros continuos, en especial las que tienen diabetes tipo 1. Los glucómetros continuos miden la glucosa en la sangre cada ciertos minutos. Usan un dispositivo que se coloca sobre la piel junto con un sensor que se coloca debajo de la piel. Estos sensores descartables duran de 10 días a 2 semanas antes de que sea necesario cambiarlos. Otros tipos de sensores implantados pueden durar hasta 6 meses.
Los glucómetros continuos incluyen un trasmisor, que es un dispositivo inalámbrico que se usa en el cuerpo. El trasmisor envía la información del sensor a un programa que permite ver el nivel de glucosa en la sangre. El programa se visualiza en un receptor, un teléfono inteligente o una bomba de insulina.
Algunos glucómetros continuos indican la lectura de glucosa en la sangre en todo momento. Suelen incluir una alarma que se activa si la glucosa en la sangre sube o baja demasiado rápido. Otros glucómetros continuos requieren que compruebes los niveles de glucosa en la sangre mediante una verificación del receptor que muestra los datos del sensor. Podría ser necesario que lo hagas cada pocas horas. Algunas personas tienen que hacerlo con más frecuencia.
Con algunos glucómetros continuos sigue siendo necesario que se te hagan análisis de sangre por punción en el dedo. Estos análisis configuran el glucómetro continuo. Esto se conoce como calibración. Los análisis de sangre por punción en el dedo también ayudan a mantener la precisión de las lecturas del glucómetro continuo. Lee la guía del usuario de tu dispositivo para informarte si necesitas que se te hagan análisis de sangre por punción en el dedo y, en caso afirmativo, con qué frecuencia.
El vino puede hacer que algunas lecturas del glucómetro continuo sean menos precisas. Algunos medicamentos también pueden afectar a las lecturas, especialmente si se usan con glucómetros continuos más viejos. Los siguientes son medicamentos que pueden afectar las lecturas de glucosa en la sangre:
- Acetaminofén (Tylenol, otros).
- Albuterol (Proair HFA, Ventolin HFA, otros).
- Aspirina.
- Atenolol (Tenoretic, Tenormin).
- Atorvastatina (Atorvaliq, Lipitor).
- Oleato de etanol (Ethamolin).
- Lisinopril (Zestril, Qbrelis).
- Vitamina C (Airborne, Emergen-C, otros), también comercializada como suplementos de ácido ascórbico.
Las dosis estándar de acetaminofén de hasta 1000 miligramos para un adulto no afectan las lecturas de los glucómetros continuos más recientes. Los suplementos de ácido ascórbico de menos de 500 miligramos tampoco parecen afectar las lecturas de los glucómetros continuos más recientes.
Si necesitas tomar medicamentos que puedan afectar la exactitud de las lecturas, revisa el prospecto que acompaña al sensor. O habla con el profesional de atención médica. Es posible que te indiquen que verifiques los resultados de tu glucómetro continuo con un glucómetro estándar. Consulta con el profesional de atención médica sobre el uso de un glucómetro continuo si te ocurre lo siguiente:
- Tienes un embarazo.
- Recibes diálisis.
- Presentas un cuadro fuerte de la enfermedad.
Estas afecciones pueden afectar las lecturas de glucosa en la sangre de un glucómetro continuo.
Conoce tu nivel deseado
Pregunta al equipo de atención médica cuál es el rango de glucosa sanguínea indicado para ti. El profesional de atención médica trabaja contigo para establecer los resultados objetivo del examen de glucosa sanguínea en base a factores como los siguientes:
- El tipo de diabetes que tienes
- Tus síntomas
- Tu edad
- El tiempo que llevas teniendo diabetes
- La posibilidad de embarazo
- Cualquier enfermedad relacionada con la diabetes que tengas
- Tu estado de salud general y otras enfermedades que tengas
- El costo, la complejidad y la frecuencia de los efectos secundarios de los medicamentos que se usan para el tratamiento de la diabetes
La Asociación Americana de la Diabetes suele recomendar los siguientes niveles de glucosa sanguínea: Estos objetivos son para la mayoría de las personas saludables con diabetes que toman medicamentos:
- De 80 a 130 miligramos por decilitro (mg/dl) o de 4,4 a 7,2 milimoles por litro (mmol/l) antes de las comidas
- Menos de 180 mg/dl (10 mmol/l) 2 horas después de las comidas
Sin embargo, la Asociación Americana de la Diabetes señala que estos objetivos suelen variar. Dependen de la edad y la salud. Informa al profesional de atención médica si sueles tener el nivel de glucosa sanguínea más alto o más bajo que el rango objetivo.
Algunas personas tendrán objetivos de glucosa sanguínea ligeramente más altos, como las siguientes:
- Personas que tienen 60 años o más
- Personas con otras enfermedades, como las cardíacas, pulmonares o renales
- Personas que no tienen síntomas de glucosa sanguínea baja Esto se denomina desconocimiento de la hipoglucemia.
Cómo medir el nivel de glucosa en la sangre
El glucómetro se utiliza para medir la glucosa en la sangre. Este dispositivo indica la cantidad de glucosa en una pequeña muestra de sangre. Por lo general, la sangre se obtiene de la punta del dedo. Luego, la sangre se coloca en una tira reactiva desechable. Con determinados glucómetros continuos, es posible que sigas necesitando un glucómetro para calibrar diariamente tu glucómetro continuo.
El profesional de atención médica o el especialista certificado en educación y en atención médica de la diabetes pueden recomendar un glucómetro continuo apropiado para ti. Asimismo, también te ayudará a que te informes sobre el uso de tu glucómetro.
Sigue las instrucciones del glucómetro. En general, así es cómo funciona el proceso:
- Lávate y sécate bien las manos. La presencia de alimentos y otras sustancias en las manos puede derivar en una lectura incorrecta.
- Coloca una tira reactiva en tu glucómetro.
- Pínchate un lado de la punta del dedo con la aguja que viene con el kit de la prueba. Esta aguja también se conoce como lanceta.
- Toca la gota de sangre con el borde de la tira reactiva y sostenla.
- En unos pocos segundos, el glucómetro mostrará tu nivel de glucosa en la sangre en la pantalla.
Algunos glucómetros pueden analizar la sangre que se obtuvo de otra parte del cuerpo, como el antebrazo o la palma de la mano. Sin embargo, es posible que estas lecturas no sean tan exactas como las lecturas de las puntas de los dedos, especialmente después de una comida o durante el ejercicio. En estos momentos, los niveles de glucosa en la sangre cambian con mayor frecuencia. No se recomienda usar otra parte del cuerpo que no sean las puntas de los dedos cuando ajustes un glucómetro continuo. Este proceso también se conoce como calibración.
Registro de los resultados
Consulta con el profesional de atención médica con qué frecuencia debes registrar los resultados de la glucosa sanguínea. Las lecturas de muchos artefactos pueden enviarse a una computadora o un dispositivo inteligente.
Si escribes los resultados en un diario, asegúrate de registrar lo siguiente:
- Fecha
- Hora
- Resultados de las pruebas
- Cualquier medicamento que tomes y la dosis
- Información sobre la alimentación y el ejercicio
Lleva los registros de los resultados a las revisiones con el profesional de atención médica. Pregunta qué medidas debes tomar si tus resultados no suelen estar dentro del rango de tus metas objetivo.
Cómo evitar problemas con el glucómetro
Los glucómetros se deben usar y cuidar correctamente. Sigue estos consejos:
- Consulta la guía del usuario de tu dispositivo para obtener las instrucciones. El funcionamiento puede ser diferente entre un dispositivo y otro.
- Utiliza una muestra de sangre del tamaño que se indica en la guía del usuario.
- Usa solo las tiras reactivas específicas de tu glucómetro.
- Guarda las tiras reactivas según las instrucciones.
- No uses tiras reactivas que caducaron.
- Limpia el dispositivo y haz controles de calidad según las instrucciones.
- Lleva el glucómetro a tus visitas de atención médica. De esta forma, podrás hacer todas las preguntas que tengas. También podrás pedirle al profesional de atención médica que revise cómo usas el glucómetro y se asegure de que lo haces bien.
Last Updated Apr 20, 2024
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